En esta colección se integran materiales relacionados con Don Juan de Palafox y Mendoza , eclesiástico y administrador colonial español. Obispo de Puebla de los Ángeles, en 1642 desempeñó durante unos meses los cargos de virrey y arzobispo de México. Durante su mandato reformó los estudios universitarios. Como nuevo obispo de Puebla, tuvo enfrentamientos con los jesuitas por cuestiones de jurisdicción eclesiástica. Al volver a España (1649) ocupó el obispado de Osma. Fue autor, entre otras obras, del Sitio y Socorro de Fuenterrabía y Sucesos del año 1633 (1639), escrito a instancias de Felipe IV. Fue beatificado en el Vaticano el 5 de junio de 2011, por el Papa Benedicto XVI, declarando a Palafox y Mendoza, el Santo de la Nueva España.
Los materiales se encuentran disponibles en formato físico para su consulta en la Sala de Archivos y Colecciones Especiales de la Biblioteca .
Juan de Palafox y Mendoza (1600-1659) fue Obispo de Puebla de los Ángeles (Tlaxcala, México) de 1640 a 1648, y de Burgo de Osma (Soria) de 1654 a 1659. Era hijo natural de Jaime de Palafox y Mendoza, Marqués de Ariza y Ana de Casenate y Espés. Nació en Fitero (Navarra) y hasta los diez años no fue reconocido por su padre. Juan escogió sus apellidos libremente a partir de sus antepasados, como era usual entonces.
Fue Fiscal del Consejo de Guerra en 1626 y del Consejo de Indias en 1629, fue Visitador del Convento de las Descalzas Reales de Madrid y Capellán de la emperatriz María, hermana de Felipe IV, viajó por toda Europa dos años.
En 1639 fue presentado por el Rey como Obispo de Tlaxcala (cuya sede era la ciudad de Puebla de los Ángeles), en Madrid, siendo confirmado por el Papa Urbano VIII, el 27 de octubre de ese mismo año. Se distinguió por sus esfuerzos en la protección de la población indígena, prohibiendo emplear cualquier método de conversión que no fuera el de la persuasión.
Fue nombrado también visitador y comisionado para someter a juicio al Virrey Don Diego López de Pacheco Cabrera y Bobadilla, Duque de Escalona y Marqués de Villena, de cuya fidelidad al Rey se dudaba en la Corte.
Durante este periodo, Juan de Palafox ocupó temporalmente el cargo de Virrey de Nueva España, en funciones desde el 10 de junio al 23 de noviembre de 1642; En este lapso formó las ordenanzas para la Universidad, la Audiencia y los abogados, y levantó 12 milicias para la defensa, pues temía que pudieran propagarse por la Colonia las revoluciones de Portugal y Cataluña.
En Puebla fundó el convento de religiosas dominicas de Santa Inés; redactó constituciones para el seminario de San Juan y erigió los colegios de San Pedro (para gramática, retórica y canto llano) y el de San Pablo (para grados académicos) al que dotó de una excelente biblioteca, hoy llamada Palafoxiana. Creó el colegio de niñas dedicado a la Purísima Concepción y dedicó sus mejores esfuerzos a terminar la Catedral, que consagró el 18 de abril de 1649.
Vacante la sede Metropolitana por la muerte de Monseñor Don Feliciano de Vega y Padilla (1641) mientras viajaba desde Acapulco, el Cabildo eclesiástico lo eligió Arzobispo de México el 12 de noviembre de 1643.
Su defensa de la Jurisdicción episcopal es un capítulo que sólo puede entenderse teniendo presente la responsabilidad del Obispo como ejecutor de las disposiciones del Concilio Tridentino. El gesto de la designación de Conservadores (mayo de 1647), que llegaron a declarar Sede Vacante con el Obispo presente en el territorio, haciendo caso omiso de tres provisores designados legítimamente para suplirle en caso de ausencia, revestía una gravedad tal, que, según diagnosticaba Palafox, amenazaba la estructura misma de la Iglesia. Sobre el tema escribió Palafox mucho y muy claro, obligado a contrarrestar la propaganda de sus adversarios. Sin embargo, en la historiografía eclesiástica, su versión ha tenido menos eco que la contraria.
A causa de no ser aceptado por los regulares a sujetarse a visita y examen, conforme lo disponían varias cédulas reales, Palafox nombró 36 curas regulares y erigió otras tantas parroquias.
Debido a su papel en el contencioso mencionado, encontró la hostilidad de los jesuitas (1645), lo que motivó su gran aversión hacia ellos. En dos ocasiones (1647 y 1649) manifestó mediante quejas formales ante el papado de Roma sus desavenencias. Inocencio X, sin embargo, rechazó estimar sus censuras y todo lo que pudo obtener fue un informe de 14 de mayo de 1648 que instaba a los jesuitas a respetar la jurisdicción episcopal. En 1653 los jesuitas consiguieron su traslado a España.
En España fue nombrado obispo de Osma, donde murió a los pocos años. Está enterrado en su Catedral, en una capilla (Capilla del Venerable Palafox) proyectada por Juan de Villanueva.
Su biografía fue el tema de la primera tesis doctoral en Historia defendida por una mujer, Cristina de Arteaga, en la Universidad Complutense de Madrid en 1930.
El 27 de marzo de 2010 el papa Benedicto XVI firmó la beatificación del obispo-virrey y la ceremonia de Beatificación tuvo lugar en Osma, el seis de junio de 2011.
José L.G. de Paz. Palafox y Mendoza. Consultado el día 15 de diciembre de 2011. Addenda de 2010. http://www.uam.es/personal_pdi/ciencias/depaz/mendoza/palafoxm.htm
Diócesis de Tlaxcala. Juan de Palafox y Mendoza. Consultado el 10 de enero de 2012.