También está el sello del Convento de la Sagrada Familia de Calpan, donde ahora está el noviciado. Otros sellos pertenecen a Sacerdotes y escudos de la orden carmelitas. Los frailes franciscanos nunca han tenido este tipo de sellos personales, se explica la presencia de éstos porque las bibliotecas de la Provincia del Santo Evangelio, como otras de distintas órdenes religiosas, se vieron desprovistas de sus bienes materiales en el siglo XIX debido a las leyes de Reforma, promulgadas por el Presidente Benito Juárez. Durante el siglo XX, algunos frailes franciscanos se dieron a la tarea de completar los libros desaparecidos que, por su temática, eran importantes para la formación de los frailes estudiantes. Por este motivo, se encuentran varios sellos religiosos, de particulares y de instituciones de gobierno, todos ajenos a la orden, pero que forman parte de la historia de este acervo.