Tesis profesional presentada por
Licenciatura en Arquitectura. Departamento de Arquitectura. Escuela de Artes y Humanidades, Universidad de las Américas Puebla.
Jurado Calificador
Presidente: Dr. Nicolás Esteban
López Tamayo
Secretario: Mtro. Miguel Arriaga y Razo
Vocal: Dra. Anne Kristiina Kurjenoja
Lounassaari
Suplente y Director: Dr. José Blas Ocejo
Moreno
Cholula, Puebla, México a 14 de enero de 2005.
El ser humano es un punto más en una línea kilométrica, otro borrego en el rebaño, una hormiga más en su agujero, un grano de arena en el desierto, una idea que nunca surgió. Parece que está encadenado a seguir la misma línea y no quebrarla, a no explorar más allá del corral y juntarse con lobos, a no cavar más por el temor de no encontrar el regreso al hormiguero, a ser arrastrado tanto por el viento y encontrarse en lo más alto de una palmera, a que su idea sea tan intensa y electrizante que estalle.
En una era en donde la tecnología se ha convertido en la perversa manipuladora de la humanidad, las ciudades ven pasar vidas enteras envueltas en la rutina deambulando como seres robotizados, las sonrisas han sido borradas de los rostros y la mínima expresión es lo que realmente importa, se han convertido en metrópolis Miesianas en donde: menos es más. ¿Qué mejor vestigio para la humanidad que un aparato arquitectónico que refleje el vertiginoso cambio con el que avanza esa tecnología, y que brinde la oportunidad de sensibilizar a todo aquel que se deje? Nadie tiene la exclusiva de vivir y disfrutar arquitecturas diferentes. Es por eso que se necesita de un objeto que se transporte dentro de la ciudad y de ciudad en ciudad, que sea lo suficientemente perceptible al problema y que tenga la capacidad de convertirse en uno de ellos, de ¡estar vivo¡, es decir, un objeto que pueda respirar, encogerse, desarmarse, armarse, estirarse, transformarse, levantarse, acostarse o colgarse. Que se mueva y que se vaya. Que su estadía sea temporal y que se implante en la memoria de todos aquellos que decidan acariciar una Arquitectura experimental que ponga a prueba todo lo que desafía la realidad, que proponga nuevas soluciones sobre si misma. Que sea transportable, movible, temporal y experimental.
Arenas Zárate, J. I., García Mascareñas, F. J. 2005. Le bodrio: Aparato itinerante de arquitectura experimental. Tesis Licenciatura. Arquitectura. Departamento de Arquitectura, Escuela de Artes y Humanidades, Universidad de las Américas Puebla. Enero. Derechos Reservados © 2005.